Corte Suprema prolonga espera de fallo sobre la Acción Ejecutiva que decide el futuro de DACA y DAPA
La Acción Ejecutiva migratoria que Obama anunció el 20 de noviembre de 2014 y que ampara de la deportación a 5 millones de indocumentados, sigue en suspenso en el máximo tribunal de justicia.
Los 5 millones de indocumentados que aguardan un fallo favorable de la Corte Suprema de Justicia para pedir el amparo de sus deportaciones, deberán seguir esperando porque los magistrados no dieron a conocer este lunes su opinión en el caso Texas versus Estados Unidos, en la primera de al menos cuatro ventanas programadas para junio.
La próxima entrega de dictámenes será el jueves. De no haber decisión, el tribunal entregará veredictos los lunes 13, 20 y 27 de junio.
Interactivo: ¿Reúnes los requisitos para DACA o DAPA?
El máximo tribunal de justicia aceptó en diciembre revisar la Acción Ejecutiva que el presidente Barack Obama anunció el 20 de noviembre de 2014. El beneficio protege a padres indocumentados de ciudadanos estadounidenses y residentes legales permanentes (DACA, por su sigla en inglés) y extiende la cobertura de la Acción Diferida de 2012 (DACA, por su sigla en inglés).
Para pedir el freno de sus deportaciones, ambos grupos deben demostrar que están en el país desde antes del 1 de enero de 2010 y carecen de antecedentes criminales. También podrán gestionar una autorización de empleo renovable cada tres años.
El freno
La Acción Ejecutiva fue demandada el 3 de diciembre por 26 estados (24 de ellos gobernados por republicanos). El 16 de febrero el juez Andrew S. Hanen, que preside la corte de distrito de Brownsville, Texas, dictó una medida cautelar que frenó temporalmente ambos programas mientras la totalidad de la demanda sigue en curso.
Los demandantes argumentan que Obama se extralimitó en sus poderes ejecutivos al cambiar la ley de inmigración sin haberle consultado al Congreso, y que las medidas, en caso de ser implementadas, obligarán a los estados a incurrir en gastos. Y que violan la Constitución.
Una fuente de la Casa Blanca dijo a Univision Noticias que no emitirá opiniones “hasta no conocer el fallo de la Corte Suprema”. La Administración sostiene que el presidente actuó dentro de sus facultades ejecutivas al ordenar la suspensión temporal de indocumentados que llevan tiempo en el país y no tienen antecedentes criminales.
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El día de los argumentos
El 18 de abril los ocho magistrados de la Corte Suprema (el juez Antonin Scalia falleció el 13 de febrero en Texas a causa de un ataque al corazón) escucharon los argumentos orales de defensores y detractores de la Acción Ejecutiva.
Los jueces Sonia Sotomayor y Stephen Breyer evidenciaron con sus preguntas estar más a favor de la idea que existen límites en torno a cuán lejos pueden llegar los estados a la hora de desafiar legalmente al gobierno federal.
Ambos fueron especialmente críticos en torno a la idea esgrimida respecto a que los estados demandantes tendrán que excederse en sus presupuestos si tienen que atender a los inmigrantes indocumentados a la hora de prestarles nuevos servicios, como la darles licencias de conducir.
El abogado Scott Keller, que representa a Texas –estado que lidera la demanda- insistió en que el Congreso es el único cuerpo legal que debe autorizar al presidente Obama a la hora de diferir cualquier deportación, por lo que reiteró que la Acción Ejecutiva no tiene base legal.
Postura conservadora
El magistrado Samuel Alito, visto como el magistrado más favorable a los argumentos de los demandantes, dijo que el argumento del costo de las licencias de conducir era el más sólido.
El juez Kennedy cuestionó el poder de Obama para detener deportaciones. La postura siembra dudas en torno al futuro de los planes de Obama porque se trata, a juicio de analistas, del voto decisivo ya que la corte se encuentra virtualmente empatada 4 a 4.
En recientes decisiones históricas tal como la Ley de Arizona SB 1070, el matrimonio entre personas del mismo sexo y la reforma de salud, Kennedy votó en contra de la primera y a favor de las otras dos, contrario a lo que anticipaban los republicanos.
El voto de Kennedy o bien le daría una victoria a Obama y permite la entrada en vigor de DACA y DAPA, o dejaría la decisión en un empate y con ello se mantiene la decisión del juez Hanen dictada en febrero del año pasado, y ratificada el 11 de noviembre por la Corte de Apelaciones del 5to Circuito de Nueva Orleans.
Clima de nervios
“Si interpretamos las preguntas que hicieron los magistrados de la Corte Suprema en abril, podemos deslindar las preocupaciones que tienen con la Acción Ejecutiva del presidente Obama sobre el alcance que tendría la misma”, dijo a Univision Noticias Lilia Velásquez, profesora adjunta de la facultad de leyes de la Universidad de California en San Diego. “¿Será sólo para diferir la deportación de unos 5 millones de personas indocumentadas o tendrá el efecto de legalizar a los posibles beneficiarios?”, planteó.
“Si es lo último, esto significa que el presidente Obama excedió su poder al entrar en territorio legislativo”, explicó Velásquez. “Una decisión sobre líneas ideológicas puede resultar en un empate. Y si esto sucede, el caso será regresado a la corte federal del distrito, la cual determinará los méritos de la demanda”.
La abogada agregó que “si la Corte Suprema decide que Texas tiene la autoridad legal para demandar al Ejecutivo, tal vez no tendrían que decidir si el presidente Obama excedió su poder al emitir la acción ejecutiva”.
Futuro incierto
Beneficiarios de DACA tienen la esperanza de renovación /Univision Television Group
Velásquez también apuntó que “la comunidad migrante, al igual que abogados de inmigración, no estamos muy optimistas sobre la decisión de la Corte Suprema, ya que los casos de inmigración siempre han sido un tema muy polémico”.
“Y las decisiones han sido divididas. Por lo tanto, anticipamos un empate, lo cual significa que la Acción Ejecutiva no será implementada”, añadió.
“Los activistas tendremos que seguir luchando para que el Congreso apruebe una ley (de reforma migratoria) para legalizar a millones de nuestra población migrante sin documentos. Si no es posible deportarlos, ¿porque no legalizarlos?”, volvió a preguntar.
El debate de la reforma migratoria fue detenido por la Cámara de Representantes (controlada por los republicanos) el 27 de junio del 2013, luego que el Senado aprobara el proyecto de ley S. 744 que incluía un camino hacia la ciudadanía para millones de indocumentados.
Larga espera
Las organizaciones que defienden los derechos de los inmigrantes están nerviosas y cruzan los dedos para que, al final del día, la Corte Suprema falle a favor de DACA y DAPA.
El lunes no acudieron al atrio de la Corte a esperar un fallo. Se concentraron en sus sedes y casas a escuchar noticias que provinieran del tribunal. “Nuestros miembros y la comunidad está preparada con pancartas positivas y negativas”, dijo a Univision Noticias Gustavo Torres, director ejecutivo de CASA de Maryland. “Cientos vamos a estar ahí una hora después del anuncio del dictamen. A partir de este lunes nos encontramos en alerta permanente”.
De acuerdo con el calendario de la Corte, las próximas ventanas se abrirán los días lunes 13, 20 y 27 de junio.
Analistas y expertos consultados por Univision Noticias coinciden en que el fallo sobre la Acción Ejecutiva, el más importante de los temas en el calendario del tribunal, será emitido al final del período de trabajo, es decir el 27 de junio. Pero nada quita que lo emitan antes.
El Plan B
“Nuestra consigna es: ¡Hoy ganamos mañana votamos! u ¡Hoy perdimos mañana votamos!”, dijo Torres previendo ambos escenarios.
En noviembre los estadounidenses acudirán a las urnas para elegir al sucesor de Obama y un nuevo Congreso. Los grupos pro inmigrantes han dicho que la participación latina en los comicios se ha convertido en el Plan B de la Acción ejecutiva, factor clave que no solo decidirá al nuevo inquilino de la Casa Blanca sino quién toma asiento en la Cámara de Representantes y en el Senado.
El voto hispano, estimado en unos 23 millones, podría dar luz verde a la reforma migratoria en el Congreso y poner fin al problema de los 11.3 millones de indocumentados. “Pero de ellos solo poco más de 12.5 millones está inscrito para votar”, dijo a Univision Clarissa Martínez de Castro, directora de campañas del Consejo Nacional de La Raza (NCLR, por su sigla en inglés).
Otros 8 millones de residentes legales permanentes, de ellos 6 millones de hispanos, reunían en septiembre del año pasado requisitos para convertirse en ciudadanos y votar el primer martes de noviembre.
El fantasma de las redadas
Un tema que no pasa desapercibido entre la comunidad inmigrante son las redadas de inmigración. A pesar que existe un “cauteloso optimismo” sobre la decisión de la corte, la posibilidad de un empate 4 a 4 se encuentra sobre la mesa de probabilidades. De ser así, el futuro de la Acción Ejecutiva regresará al tribunal de Texas, instancia que detuvo la entrada de DACA y DAPA.
“Nuestra opinión es que el presidente Obama actuó mediante la ley, y el gobernador de Texas Gregg Abott y los demás gobernadores (que demandaron la Acción Ejecutiva) actuaron con la excusa más pequeña que les diera la oportunidad de litigar y así detener los programas”, dijo a Univision Noticias Jaime Barrón, un abogado de inmigración y activista en Houston.
Barrón agregó que, en general, “la comunidad inmigrante siente que se va a beneficiar” con las medidas del presidente, y que la demanda tenía como objetivo liberar el miedo a las batidas de inmigración.
“Creemos que se trató de una táctica algo sucia”, agregó.
Las prioridades del gobierno
El gobierno federal trata de apaciguar los miedos. El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por su sigla en inglés) reiteró la vigencia del memorando del 20 de noviembre de 2014 que incluye la lista de prioridades de deportación, y señaló que los beneficiarios de DACA y DAPA no figuran dentro de esas preferencias.
La oficina del Congresista demócrata Luis Gutiérrez (Illinois), dijo a Univision Noticias que “confiaba” en un fallo favorable de la Corte Suprema”, y citó que las acciones de los antecesores de Obama y decisiones anteriores del Tribunal Supremo, “apuntan a un fallo a favor de la DAPA y la extensión de DACA”.
Pero independientemente del resultado, “la tarea más importante para todos los que creen en los derechos civiles básicos y la tradición de inmigración de Estados Unidos, es asegurarse que todos los que están calificados para votar salgan a las urnas en noviembre”, dijo Douglas Rivlin, secretario de Prensa de Gutiérrez.
Tanto el Comité Nacional Republicano (RNC, por si sigla en inglés) como el liderazgo republicano en el Congreso, dijeron que no emitirán declaraciones sino hasta conocer el pronunciamiento de la Corte Suprema.
En al menos 12 estados con alta concentración de hispanos se celebran vigilias y campañas de voto durante el mes de junio, en espera del dictamen de la Corte Suprema.